7 jul 2013

Love Me - cap 23

-No la despertaré, intentaré encontrar un lugar arriba y descansar un toque- le aviso a la morena.
-¿No queres comer algo antes?
-No, gracias. Anoche ya ingerí suficiente- respondió golpeándose la panza y sacándola apropósito. Ella rió, pero alguno de los dormidos la hizo callar con molestia.
-Mejor subo y vos… descansa- le dio un beso en la mejilla y se fue a dormir.

La mañana pasó rapidísimo o al menos así lo creyó el rubio, los ruidos del piso inferior sumado a la música lo despertaron un toque sobresaltado. Había estado soñando con la sorpresa que le tenía a Lali, pero entremedio salía Peter todo ensangrentado apuntándolos y Lali comenzaba a llorar.

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-Perdón… no quise asustarte- él se aclaró la vista con rapidez para mirarla.
-No me despertaste ¿Qué hora es?- preguntó con frialdad.
-Las 8.
-¿Las 8 de la noche?- volvió a preguntar, aunque ahora con mucha menos frialdad.
-Si, según Ana dormiste bastante, me alegro que descansaras- comentó sincera.
-¿Estas hace mucho aquí? Digo, debe ser aburrido quedarse mirándome mientras duermo…
-Sí, estoy hace más de media hora… y no, no es para nada aburrido memorizar tus rasgos con detalle. Apreciar tu hermosura y enternecerme con tus defectos- hablo con total sinceridad, acercando su mano al rostro un tanto colorado de Benja.
-O sea, ya notaste esta marca de acá- señalo el costado de su frente donde tenía una pequeña cicatriz.
-Sí, la noté y hasta acaricie con cuidado para no despertarte…
-¿En serio? Esa sería una actitud de enamorada- la miró directamente a los ojos.
-Yo estoy enamorada de vos Benja… completamente- declaró acercándose- y sé que he cometido errores graves; cosas que te han dañado mucho, pero es que soy pendeja y estuve mucho tiempo en una relación así… necesito que me ayudes- le pidió acariciando suavemente el pelo sobre su frente.
-Tienes el poder de enamorar a cualquiera Lali ¿Por qué yo?
-¿Por qué vos?...- rió un tanto angustiada- ¡¿Por qué no vos?!- alzó sus hombros negando con la cabeza.
-Respondeme en serio ¿Por qué me elegiste a mí?
-Mi futuro sentimental nunca fue un casting, vos simplemente llegaste a mi vida como la luz en la oscuridad… encendiste todo mi mundo y me OBLIGASTE a amarte con esa forma tan especial de ser- le respondió sincera- no esperaba rehacer mi vida tan pronto, pero en el corazón no se manda… “nadie elije de quien enamorarse”… yo tuve el privilegio de enamorarme del hombre ideal y que me corresponda- una solitaria lagrima rodó por su mejilla, pero antes de caer, fue interceptada por el dedo del rubio.
-Solo eso necesitaba oír para entenderte- y sin darle tiempo a más palabras la atrapó de la cintura pegándola a su torso desnudo y sobre la cama se besaron largamente, sin contener la pasión y el deseo del uno por el otro.

Ni siquiera la falta de aire los podía separar, entre movimiento y movimiento respiraban con dificultad, pero con tal de no separarse lo seguían haciendo. Lenguas iban y venían, envolviéndose en un sensual juego… las ganas de ser solo uno los envolvían, el tiempo se detuvo y la temperatura aumentó. Era el momento apropiado, era LA oportunidad de hacerlo. Pero el destino tenía planificado otra cosa y fueron interrumpidos.

-Che Benshu, ¿vas a hacer la sorpresa o no?- la voz distraída de Cande interrumpió el pasional beso de los tortolos, quienes se separaron como imanes iguales. La castaña solo atinó a cubrirse la boca arrepintiéndose de no haber dejado el culo pegado al sofá donde conversaba animadamente con Vico.

Ambos estaban agitados al máximo, colorados como tomate e intentado ser tragados por la tierra. Pero a diferencia de Benja, Lali tenía la curiosidad impregnada en el rostro.

-¿de qué sorpresa hablas Can? Segunda vez que lo mencionas- no obtuvo respuesta, ella seguía tapándose la boca- ¿Benja?- él miro a su amiga queriendo asesinarla.
-Ni idea… ¿de qué hablas Cande?- le tiró la pelota a ella, quien lo miro con desesperación.
-Yo… yo… yo…- no sabía que decir.
-¡Si vos!
-¡¡Yosoloqueriaquellevaranelmismodisfrazhoyenlafiesta!!- gritó tan rápido que ni se entendió.
-¡¿Queeeé?!- preguntaron al unísono.
-Que solo quería que llevarán el mismo disfraz- repitió lentamente. Ambos se miraron y rieron.
-Amiga ¿Cómo vamos a llevar el mismo disfraz?- se levantó y la abrazó con ternura- pero tranqui que será temático…
-¿temático?
-Se refiere a que iremos disfrazados en la misma onda Cande- rió aliviado de haber zafado.
-Ahhhhh, bueno genial así, porque a eso mismo me refería- sonrió forzosamente- los dejo para que arreglen sus cosas- cuando cerró la puerta a su espalda, se apoyo contra la pared y respiró aliviada, maldiciéndose por ser tan despistada.

Mientras tanto en el cuarto Lali se apoyo contra la puerta y lo miró sonriendo.

-Le dicen la corta mambos a esta- bromeó.
-Así parece- él se puso en pie, quedando solo en bóxers y se acero a ella acorralándola- aunque podríamos seguir con lo que estábamos…
-Creo que ESO tendrá que esperar, porque la fiesta de disfraces ya va a comenzar- él la miró con cara de súplica- ¡por eso te vine a despertar!
-Laaaaaaaaaa
-Nada de La, ahora vas y te das una buena ducha fría- lo empujó como pudo hasta el baño.
-¿Me querés jabonar la espalda?- preguntó tentadoramente.
-¡¡Obvio que quiero!!- él volteo al instante- pero en otro momento- y dándole un fugaz pico se fue a cambiar.
-¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!- gritó golpeándose un tanto fuerte la cabeza contra la puerta.




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-¡¡Obvio que quiero!!- él volteo al instante- pero en otro momento- y dándole un fugaz pico se fue a cambiar.
-¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!- gritó golpeándose un tanto fuerte la cabeza contra la puerta.

La casa de Mica estaba completamente llena de gente, realmente no se sabía quién era quien, ni siquiera se podía saber si algún colado pudo entrar. Aunque estaban alejados del resto de las casas veraniegas, más de algún paparazzi pudo haberse enterado de algo, pero era una vaga posibilidad. Tampoco eran chicos reallity o figuras extremadamente importantes en la TV argentina, solo eran un montón de jóvenes promesas celebrando el cumple de la más linda (nota de la autora: para mí, La siempre será la más hermosa).

Las luces que se instalaron durante el día daban un ambiente mucho más impresionante. Parecía un boliche de alta estirpe, esos donde el VIP es más grande que todo lo demás, aquellos donde los famosos se desenvuelven con total facilidad sin riesgos a toparse con fans locas. Era puro lujo.

La mayoría de los chicos lucían trajes originalísimos. Nico estaba mimetizado con “Wolvenine” -el mítico personaje de X-men- tan mimetizado que peleaba con Gas, quien vestía espectacularmente el traje del “joven manos de tijeras”. El rubio llevaba la cara más pálida de lo normal, con marcadas ojeras y una peluca negra con los pelos electrocutados. Obviamente lo que más lo caracterizaban eran el par de grandes tijeras podadoras que llevaba en sus manos.

-¡Tengan cuidado con eso boludos!- Cleopatra pasó gritando por su lado. Era bastante raro ver a Mery con pelo negro y liso, además de ese flequi recto, pero nadie podía negar lo diosísima que se veía.

-Dejalos amor- Meme mostraba todo su lomazo, vestido como “Marco Antonio” el soldado y político romano más importante de la historia. Y enamorado de Cleopatra.

-Cuando se saquen un ojo quiero verlos eh- los amenazo temerosa, Nico le lanzo un beso y siguió jugando con su mejor amigo.

Mientras ellos jugaban como niños pequeños, “Barnie” espantaba a “Winnie the pooh”. Agus y Pato siempre serían unos pendejos y no tenían temor a hacer el ridículo, así que optaron por ser aquellos felpudos personajes animados. Ana les tomaba fotos a todas, envuelta en su disfraz de “Pocahontas”. Con el pelo liso al máximo y una pluma en la cabeza complementaba el vestido café corto, apretado por un cinturón.

-¿Por qué llevas pluma?- pregunto su novio, quien estaba rubio y con el pelo al hombro, era “John Smith” el eterno enamorado de la morena- ¡¡Pocahontas no usa pluma Any!!

-¡Uy verdad! Le dije a Cande que la pluma estaba demás- ambos rieron buscando a la castaña para decirle- ¿ves por ahí a Cupido?- pregunto refiriendose a Cande.

-¡Escuche que me invocaban!- la aludida llegó extasiada, vestía una túnica cortísima blanca, con una aureola muy mona. Sandalias bajas y en sus manos, un arco y una flecha. El pelo iba con bucles y recogido en un moño alto. Divina.

-¡Cande, viste que pocahontas no llevaba pluma!- se quejó divertida.

-Sí lleva nena, yo crecí con ella- respondió fingiendo indignación.

-No Cande, no lleva pluma… y Cupido no lleva aureola- un chico hippiento y con la panza de chocolate al aire la corrigió.

-Vico, dejate de joder. Obvio que Cupido tiene aureola, ¡porque es el ángel del amor!

-Nooooo
-Siiiiiiiiiii- parecían niños pequeños.
-Nooooo- volvió a rebatir, quizá tenía razón, pero siempre imagino a Cupido sin aureola.
-Siiiiiiiiiii y dejate de joder- molesta se fue.

-¿Se enojó?- parecía sorprendido- ¿realmente Cande se enojó?- Any y Cristian levantaron los hombros restándole importancia y se fueron.


En otro lado de la casa, una “tortuga Ninja”] con cinturón negro y antifaz del mismo color hablaba un tanto exasperado con una hermosa versión de la “Cenicienta”. Eran Pablo y Rocío, pero claramente estaban discutiendo por algo.

-¡Te dije que era de príncipe Pablo!

-Y yo te dije a vos que siempre quise ser una tortuga Ninja- se quejó amurrado como niño chico.

-No podes ser tan inmaduro…

-¿Inmaduro? El disfraz era de libre elección Rocío

-Pero todas las parejas están disfrazados acorde- con los brazos cruzados miró a su alrededor. Meme y Mery; Any y Jorge, Mica y su novio…

-Bueno, pues nosotros rompimos el molde, cambiamos la historia. En nuestra historia Cenicienta se enamora de una tortuga Ninja ¿viste?- claramente no tenía intensiones de pelear con su novia.

-Pues no se qué le vió Cenicienta a la fea tortuga Ninja- ambos rieron y se besaron. La rubia quedó con la boca verde, por el maquillaje de Pablito.

-¿Por qué estas besando a un marciano Ro?

-No soy un marciano ¡¡Soy una tortuga Ninja che!!- paró en seco a la moderna versión de Marilyn Monroe, señalando su caparazón.

-Well… no pareces tortuga, pero lo sos- Jime se burlo, las risas de Cenicienta la apoyaron.

-¿Y vos quien sos? ¡¿Una mala copia de Madonna cantando “Ilike a Virgen”?!- la mandíbula de Marilyn se desencajo y achino los ojos amenazadoramente.

-Soy Marilyn Monroe, la más diosa de todas, la mejor actriz, rompe esquemas…

-Pareces una conejita playboy del siglo pasado- la molestó con descaro, aun notando lo hermosa que se veía con ese vestido plisado blanco y el peinado alto de bucles. Sumado al sexy lunar, los tacones y el rojo intenso de sus labios.

-¡¡Pablo!! Anda a jugar con Barnie y Winnie allá mejor ¡pendejo!- lo empujó ensuciándose las manos también de verde.

-Te ves hermosa Jime.

-Gracias Ro, vos también estas muy diosa, super inocente…

-Y vos súper atrevida eh- ambas rieron y comenzaron a bailar.


La fiesta estaba de lo mejor, todos bailaban, saltaban e incluso coreaban algunas canciones que les traían buenos recuerdos. El ambiente estaba espeso por la nube de humo que provocaron los cigarrillos y varios vasos se habían roto por accidente, todo hasta ahí iba de lo mejor. Era una fiesta normal, con gente divirtiéndose a todo lo que da… pero aún faltaba la cumpleañera.

-¿Y Lali?- Benja llegó al lado de una enojada Cupido.

-¡¡Que se yo “pin pon”!!- y se fue enojada.

-¿Qué le pasa a esta? ¿y como que pin pon? ¡¡Soy un muñeco cualquiera, no pin pon!!- gritó lo ultimo para que lo oyera, aunque ya se había ido.

-Dejala, yo me encargo- Vico llego a su lado agitado, la venía siguiendo desde hace bastante- está enojada, pero no entiendo porque tanto- dejó de hablar y lo miró- ¿Qué mierda te pusiste?

-¡Soy un muñeco!- le pegó en el hombro. Amaba que Lali lo llamará así, pero quizá disfrazarse como uno no fue la mejor de las ideas.

-Realmente te pareces a pin pon boludo- y devolviéndole el golpe se fue- ¡andate a lavar la carita con agua y con jabón!- todos los que estaban cerca se rieron, haciendo sonrojar sus mejillas ya rojas por el maquillaje.

-¡Ahí viene Lali!- gritó Yeyo, caracterizado como un moderno rapero.

La morochita cumpleañera bajó la escalera sonriendo e iluminando la existencia de Benja. Llevaba un cortito vestido escocés multicolor, zapatitos de charol y una blusita blanca bajo el vestido. Sus mejillas igual de rojas que las del rubio y rosadas pestañas postizas. El pelo tenía bucles y uno que otro mechón pintado de rosado también, en su brazo iba un osito de peluche y en la boca un chupón. Era la muñeca más hermosa que Amadeo vió en su vida [i]¡Como la amaba![/b]

-¡Muñequito!- gritó viéndolo disfrazado y lanzándose a sus brazos.

-Muñequita hermosa- le saco el chupón y la beso con delicadeza- feliz cumple bombona- y volvió a besarla.

-Te ves hermoso ¿Quién te ayudó?

-Nadie- ella abrió los ojos sorprendida- me maquille solito, me peine solito y me vestí solito… ya que vos no me quisiste con poca ropa- hizo un puchero y ella lo golpe suave.

-Te amo- declaró sin tapujos.
-Te amo más- compitió de una.
-No, yo te amo más…
-Error, mi amor es mucho más grande- sonrió.

-A ver… dime hasta donde llega tu amor y yo te diré si es más grande que el mío- mientras peleaban estaban bailando un lento. Él la tomaba de la cintura y ella se amarraba a su cuello.
-Te amo… tres metros por sobre el cielo.

-¡Versero! Esa es una película- rió tentada.

-Una gran película- asintió con la cabeza.

-Pues yo te amo sin agregados, sin muchos, o siempres… te amo a secas… te amo sin condicionantes, ni limitantes- los azules ojos de Benja se aguaron.

Aunque muchos a su edad andaban de joda en joda, tomando, fumando o drogándose, él marcaba la diferencia. Era un chico tranqui desde siempre, amante de la música, la lectura y la soledad. Cuando pensaba en el amor, lo veía como algo lejano, distante e incluso incierto. Pero ahora que la tenía frente a sus ojos, con la sonrisa eterna y esa expresión de amor tan genuina, supo lo que era estar realmente enamorado. Supo que valió la pena la espera.

-Sos mi ángel… y ya no creo que existan palabras para expresar lo que siento- una lágrima rodó por la mejilla de la cumpleañera- pero quizá con mi sorpresa puedas entenderlo.

-¿O sea que había una sorpresa?

-Sí, aunque Cande casi la caga- ambos se rieron y besaron.

-Pues quiero verla.

-No seas ansiosa, al final de la fiesta te la daré- ella sospechaba que sería algo inolvidable. Benja era un dulce de leche mal. Siempre pendiente de sus necesidades y sorprendiéndola.


El resto de la noche fue un fuego, todos estaban medio locos cuando Lali hablo por el micro que le accedió el Dj.

-Bueno chicos, quería agradecerles por estar acá. Por acompañarme y demostrarme su gran cariño…

-¡Te quiero La!- quien más que Nico podía interrumpir de un grito el discurso.

-Yo también rubio. A todos… cada uno tiene un pedacito de este corazón, que no digamos es un GRAN corazón, pero va con mi tamaño ¿no?- todos rieron. Esa manía eterna que tenía de bromear con su estatura- Y también comunicarles que ya mañana volvemos al mundo real- algunos abuchearon- ¡Aplausos para Mica que se rajo con la casa! Sos una genia amiga- la aludida hizo una reverencia- Gracias amigos, familia y amor. Me han hecho muy muy feliz- un toque emocionada devolvió el micro.

-¡A divertirse!- gritó nuevamente Nico. Estaba notoriamente borracho, o sea, era aun más gracioso.


-Creo que a ese deberían sacarle las garras, de repente matará a alguien- bromeó un marciano a su lado.

-Sorry pero ¿Quién sos? ¿ET?- estallo en esa risa tan única y contagiosa.

-¿Ah estas chistosita?- Pablo se cruzo de brazos- ¡soy una tortuga Ninja!- volvió a apuntar el
caparazón y la espada.

-Ahhhhh, o sea, sos Poli- el sonrió como payaso y asintió. Lali sabía de su tremendo amor por esos dibujos animados en la infancia- me gusta, aunque de payasito te ves mejor.

-¿vos decís?- ella sintió riendo y rememorando esas notables escenas con su amigo ¡Cuánto habían jugado ese día!- pensé en el payasito, pero era poco original…

-Sí, igual no me habría gustado ver a Ro de payasita eh- lo amenazó y el rió abrazándola.

-Sos mi única payasita, ella es mi cenicienta y yo su tortuga Ninja.

-Se parecen más a la princesa y el sapo- nuevamente estalló en risas. Y él no pudo evitar contagiarse.


-¿Qué es tan gracioso?- Benja llegó a su lado con un vaso en la mano.

-Pablo, miralo ¿Quién es?

-Una tortuga Ninja ¡obvio!- respondió sin entusiasmo.

-Naaa, me cagaste todo el chiste, tenías que decir ET o un marciano o una rana ¡pesado!- lo golpeo
en el brazo.

-Pero si soy idéntico a una tortuga La- Poli la empujó.

-Sí, mi amor. En esta no te puedo hacer la segunda, aquí este psicópata esta re bien disfrazado- levantó los hombros.

-¿Cómo que psicópata?- los tres rieron- y vos serias… ¿pin pon?- preguntó tentado.

-¡OTRO MÁS!- rabio por lo bajo- soy un muñeco común…

-No sos común, sos MI muñequito- le dio un pico- ¿no ves que estamos iguales?- le dijo a Pablo, defendiendo a su enamorado.

-Así veo… - asintió aguantándose la risa- ¿y porque vestirse así?

-Porque así nos decimos “muñequitos”- ahí si Pablo no aguanto la risa.

-¡¿Qué te reís boludo?! Acaso “payasitos” es muy bonito.

-¡Yaaaaa, stop! Miren que los dos apodos me encantan- rió Lali.

-Igual y se disfrazaban de Ken y Barbie mejor, tipo son muñecos y son menos ridículos- y viendo la cara de Lali, salió arrancando. Como le encantaba burlarse de Benja.

-¡Me dan ganas de ahorcarlo!

-¡¡Benja!!- lo reprendió como si fuese su hijo- ni en broma se dicen esas cosas…

-Bueno, perdón- hizo un puchero y ella lo besó- ¿Cómo la estas pasando?

-¡¡Excelente!!- se acurruco en su pecho- pero quiero mi sorpresa especial… ya he aguantado mucho.

-Entonces vamos- tomó su suave mano y sin darle tiempo a preguntar más, la sacó de la fiesta.

-¿A dónde?

-A ver tu sorpresa…







Autor: chey_x_lalitas

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